APO

KALIP

SIS
El fin empezó cuando desviamos a la palabra de su camino
Cuando lanzamos su hondura fuera de nuestros ojos
El fin siempre ha sido un salto viejo
Al igual que la muerte
El fin se alza en el horizonte de trillones y trillones de años
Hasta el instante final de la última partícula

Mucho antes, la tierra será engullida en una ola roja
El núcleo será fundido
No existiría la poesía en 500 millones de kilómetros a la redonda por lo menos
Viviríamos en la helada Europa: luna de júpiter
o seríamos gases pensantes
ya con 7 patas
y 403 ojos
cuerp s glorios s
o ya estaremos muert s como ya pasó
miles de veces a la redonda
ojalá tuviéramos 403 ojos
para conocer el nacimiento con la mirada
pero solo tenemos dos
y si acaso 3 para ver más allá de la narizez

no habrá rastro de la poesía, ni de la popoesía
y reinará la / desnuda destapada irradiada / poesía
la humanidad y l s reptilian s ya no serán
porque ya el planeta azul está en modo bola de fuego
y tod s arderemos / nos ahogamos

Mientras bogota se hunde,

Nos hemos regalado a la candela del napalm
Y a las ráfagas consientes pagadas con dólares
Serpientes de aguasangre bajan por todo el trópico
Mientras se deshielan los glaciares y los nazis que nunca perdieron

Pero dentro de cada alternativa posible hay un apocalipsis diferente

Un padre de familia
Comió pensando en el apocalipsis
y soñó en la misma noche

Despertó en una colmena en lo alto de las nubes
En la iglesia sonaba un reguetón de un tal pajuelo vago

“las llamas retumban con tus nalgaaas fresas
Que tumbaste del dial taciturnito
Las llamas retumban con tus naaadas lerdas
Que rociaste dela niebla burlesca

Y dale
Y sube
Y baja
Y vela la muerte que ya se murió oh
Y dale
Y baja
Y sube”

Vio una sacerdotisa predicando
Y vistiendo una túnica transparente que le atrajo
Mientras se la jalaba oníricamente
Indignado soltó su grito horrorizado (cosas de los sueños)
Que cómo podía ser eso
Que cuál era el ejemplo para los niños
Que eso del homosexualismo es de desviados
Todo esto sin dejar de jalársela

Mientras se lo llevaban diez reptilianos por delante
A la comisaría moral llegaría con las piernas dormidas

“no duermas hoy, los golpes de esta tarde son de algodón”

La colmena brillaba por miles de años
Bajo un sol naranjado





La visión de un testigo de jehová es el infierno
El calentamiento global
Arderá todo
El cielo será naranja
Siempre más naranja
El fin empezó cuando desviamos la mirada
Por: Juan Gonzalez

Pero prometo enviarte un selfie
si la fibra óptica aún nos une.
Sabrás que
si hay un satélite en órbita
yo estaré contigo.

Me subiré a las terrazas de los edificios
para ver mejor lo que se quema.
Cuando me toque arder, miamor,
sabré si tengo madera para esto.

Ya sabes lo que dicen:
No confíes en los otros,
duerme solo con un ojo
y no le des a nadie de tu agua.

Por lo pronto, antes de que todo acabe,
quiero compartirte estas cuatro (4) verdades
que contemplo ahora:

Tendrás que asesinar o ser asesinada. Inscríbete cuanto antes en lecciones de defensa personal, artes marciales, armas blancas y armas de fuego.
Nuestro país, aunque no lo parezca, existe, y no es un show de TV transmitido en países aburridos de europa del norte, como creíamos.
Esta es la última vez que mis partículas están dispuestas de este modo. Luego será la dispersión sobre todas las cosas del mundo. Hoy es esta mi estructura atómica. Mañana no sé si permanezca esta consciencia de las fuerzas que me sobrepasan. Todo lo que de una u otra forma me ha vencido. Sobrevíveme tú e incendia nuestro idioma.
Los barristas tarde o temprano darán un golpe de estado e instaurarán la nueva era. Trata de interesarte un poco más por el deporte.

Para cuando leas esto,
por su puesto,
me habré quemado con todo.

Cierra los ojos, cariño,
cuando vuelva hecho cenizas.

Ahora soy parte del fuego.
ME VOY A PRESENCIAR EL FIN DEL MUNDO BEBÉ
Y NO PUEDO LLEVARTE CONMIGO
POR: César Cano
Collage por Danielono Ordoñez

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Editorial
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P O R: J u a n R o n d ó n

en el día uno de lo que sea
empieza
el bello horror de su fin.
Éste sincrónico apocalipsis
está suspirándonos en la cara
su aliento hiede
a mierda medieval expulsada desde las ventanas
sobre la cabeza de cualquiera
a tropas congeladas sin ninguna esvástica que los
salve
a especies extintas sin más
a minotauros encerrados en laberintos y salvados
por la poesía
a Ítacas desoladas
a niños boca abajo muertos en una playa cualquiera
a buitres y gobiernos carrangueros
a semen religioso
a huesos desordenados
confundidos
perdidos
apilados

a hierro y azufre
a presente.

Y estamos sentados con gafas oscuras
sobre lo que sería el infierno cero de Dante
apocalipsándonos
y votamos por Uribes y Bolsonaros y Trumps
y cagamos en el agua limpia
y mono cultivamos visajes
y escupimos la cara del de al lado
y nos adueñamos hasta del fin
que vienen galopando certero
por las llanuras de nuestra ignorancia
a clavarnos, implacable
las uñas en la garganta.


Y cuando poco quede
el viento más libre ahora
levantará basura y desconsuelo
algún periódico viejo
que un sobreviviente tomará
para taparse
o escribir
tal vez
algún poema triste en el borde
mientras las llagas
mientras el pús
mientras el hambre
mientras la muerte
que antes
se vio tan lejana
y ahora, de cerca
es más como un cuento de Ribeyro
que como uno de Bradbury.
¿hay alguien escuchando? por favor ¿hay alguien ahí?
Indice
El fin comenzó cuando desviamos la mirada - Huan Gonzalez